y las pesadillas más reales.
Entre la penumbra de la calle
y la luz de la lumbre
cuento con la compañía de dos gatos:
sus ronroneos suenan a canto celestiales,
después de escuchar voces del más allá.
Nadie escucha nada, solo yo.
Tal vez sea la conciencia
que no me deja descansar.
Fijo la vista en el horizonte,
a un abismo
en el que solo yo puedo entrar,
pero que solo yo puedo salir.
Nada me tranquiliza ya
solo la compalía de estos gatos
y su cantar ronroneador,
que siempre están a mi lado
y por eso los mimo con tanto amor.
©Leticia Mestre
"A los que nunca se separan de mí"
Fotografía de ©Leticia Mestre
Fotografía de ©Leticia Mestre
Todos los Derechos Reservados
Este trabajo está protegido por leyes de Copyright y tratados internacionales
Safe Creative
All rights Reserved
This work is pretected by Copyright laws and international treaties.
Safe Creative
No hay comentarios:
Publicar un comentario